Decimosexta historia: La falsa leyenda

Felechosa es uno de los pueblos más señeros del concejo de Aller y a sus habitantes se les aplican mil y una anécdotas simpáticas. La realidad nada tiene que ver con la fama. Las gentes que yo conocí de Felechosa eran personas muy inteligentes, ingeniosas y emprendedoras. Fue un pueblo que dio grandes hombres al concejo. Otros muchos que emigraron a América, hicieron pronto fortuna y siempre volvieron a su pueblo natal a disfrutarla. Las anécdotas y los dichos no hacen referencia a la verdadera nobleza, inteligencia de los hombres y mujeres de Felechosa. Pero la tradición es la tradición y yo quiero contar todo lo que mis oídos de niño oyeron respecto de los felechosanos. Siempre se decía que los de Felechosa eran los de la viga atravesá. Se quería decir con ello que los vecinos de este pueblo, cuando estaban construyendo la iglesia, intentaron vehementemente meter por la puerta, en sentido transversal, un madero grueso y largo: la viga. Faltaba en aquel momento el vecino más listo, que al ver la faena que estaban intentando sus convecinos, llenó de improperios a los equivocados y esforzados trabajadores con estas palabras:

- “A quién se le ocurrió meter la viga atravesá sin antes untala con mantega“[1].

El poeta y bablista José Campo Castañón, perteneciente a la Tertulia Literaria Allerana ha lanzado  obras en bable “libre” y académico, en su Antoloxía tiene un poema dedicado a este tema, que quiero intercalar en versión bilingüe, y que él titula:

 

Falsa Leyenda

A un llugarín que nun cito, En un lugar que no cito

enclavau nel altu Aller, enclavado en el alto Aller

llantároni un sambenito pusiéronle un sambenito

que ye falsu a mio entender. que es falso a mi entender

Dalgún maimón pregonó Algún mamón pregonó

que aquella gente sencilla, que aquella gente sencilla

fai munchu tiempu, acordó hace mucho tiempo, acordó

el facer una capilla. el hacer una capilla

Que xuntos, toos los vecinos, Que juntos, todos los vecinos,

trabayaron más d´un mes trabajaron más de un mes

trayendo piedra, tapinos[2]         trayendo piedra, tapinos

y llevantado parés. y levantando paredes.

Hasta aquí muy natural, Hasta aquí muy natural

nun hay na que mos sorprenda, no hay nada que nos sorprenda,

pero en la viga central pero en la viga central

está el quid de la leyenda. está el quid de la leyenda.

Diz esa leyenda incierta, Dice esa leyenda incierta,

y per tantu sagerá, y por tanto exagerada,

que al metela per la puerta que al meterla por la puerta

metíenla atravesá. metíanla atravesada.

Que tras tática tan mala Que tras táctica tan mala

y después de dura brega,     y   después de dura brega,

acordaron el doblala acordaron doblarla

untándola con mantega.      untándola con manteca.

¡Mentira com´una casa¡ ¡Mentira como una casa!

Sabemos los alleranos Sabemos los alleranos

que a fuerza d´untar con grasa que a fuerza de untar con grasa

solo doblen los paisanos. solo doblen los paisanos.

¿Nun lo vamos a saber ¿No lo vamos a saber

si munchos lo comprobaron? Si muchos lo comprobaron?

Les manteguines d´Aller Las mantequinas de Aller

¡a cuantos homes doblaron¡ ¡a cuantos hombres doblaron!

Persones series y fines Personas serias y finas

y muy respetables elles y muy respetables ellas

ante nuestres manteguines ante nuestras mantequinas

doblaron como cibielles[3]. doblaron como cibiellas.

A fuerza de ser sinceru, A fuerza de ser sincero

y aunque nun creu en esfriegues y aunque no creo en esfrieguas

de ningún mal curanderu, de ningún mal curandero,

tengu fé en nuestres mantegues. tengo fe en nuestras mantecas.

So virtú tá tan probá Su virtud está tan probada

que… permitíi que lo diga: que…permitid que lo diga:

nun m´estrayaría ná no me extrañaría nada

que hubieren diblau la viga. que hubieran doblado la viga.


[1] Mantega, manteca.

[2] Tapín, pedazo de tierra cubierto de cesped.

[3] Cibiella, vara flexible de árbol, generalmente de avellano.

7 comentarios

  • Por ventolin del voltio, 17 febrero 2012 @ 20:20

    Pido disculpas de antemano
    por atreverme reordenar
    el escrito de un paisano.
    Lo que les van a relatar
    en bello bable y castellano
    es una vieja historia sin par
    de un gran pueblo Asturiano.
    Antes de la copia el original,
    que en lectura y entendimiento
    tanto monta, monta… igual.
    Y con la venia señorías…
    pónganse en disposición
    tomen unas sidras frías
    y tírense en el sillón…..

    Falsa Leyenda
    A un llugarín que nun cito,
    enclavau nel altu Aller,
    llantároni un sambenito
    que ye falsu a mio entender.
    Dalgún maimón pregonó
    que aquella gente sencilla,
    fai munchu tiempu, acordó
    el facer una capilla.
    Que xuntos, toos los vecinos,
    trabayaron más d´un mes
    trayendo piedra, tapinos[2]
    y llevantado parés.
    Hasta aquí muy natural,
    nun hay na que mos sorprenda,
    pero en la viga central
    está el quid de la leyenda.
    Diz esa leyenda incierta,
    y per tantu sagerá,
    que al metela per la puerta
    metíenla atravesá.
    Que tras tática tan mala
    y después de dura brega,
    acordaron el doblala
    untándola con mantega.
    ¡Mentira com´una casa¡
    Sabemos los alleranos
    que a fuerza d´untar con grasa
    solo doblen los paisanos.
    ¿Nun lo vamos a saber
    si munchos lo comprobaron?
    Les manteguines d´Aller
    ¡a cuantos homes doblaron¡
    Persones series y fines
    y muy respetables elles
    ante nuestres manteguines
    doblaron como cibielles[3].
    A fuerza de ser sinceru,
    y aunque nun creu en esfriegues
    de ningún mal curanderu,
    tengu fé en nuestres mantegues.
    So virtú tá tan probá
    que… permitíi que lo diga:
    nun m´estrayaría ná
    que hubieren diblau la viga.

    Falsa Leyenda
    En un lugar que no cito
    enclavado en el alto Aller
    pusiéronle un sambenito
    que es falso a mi entender
    Algún mamón pregonó
    que aquella gente sencilla
    hace mucho tiempo, acordó
    el hacer una capilla
    Que juntos, todos los vecinos,
    trabajaron más de un mes
    trayendo piedra, tapinos
    y levantando paredes.
    Hasta aquí muy natural
    no hay nada que nos sorprenda,
    pero en la viga central
    está el quid de la leyenda.
    Dice esa leyenda incierta,
    y por tanto exagerada,
    que al meterla por la puerta
    metíanla atravesada.
    Que tras táctica tan mala
    y después de dura brega,
    acordaron doblarla
    untándola con manteca.
    ¡Mentira como una casa!
    Sabemos los alleranos
    que a fuerza de untar con grasa
    solo doblen los paisanos.
    ¿No lo vamos a saber
    Si muchos lo comprobaron?
    Las mantequinas de Aller
    ¡a cuantos hombres doblaron!
    Personas serias y finas
    y muy respetables ellas
    ante nuestras mantequinas
    doblaron como cibiellas.
    A fuerza de ser sincero
    y aunque no creo en esfrieguas
    de ningún mal curandero,
    tengo fe en nuestras mantecas.
    Su virtud está tan probada
    que…permitid que lo diga:
    no me extrañaría nada
    que hubieran doblado la viga.

  • Por ventolin del voltio, 21 febrero 2012 @ 11:14

    Pido disculpas de antemano
    por atreverme reordenar
    el escrito de un paisano.
    Lo que les van a relatar
    en bello bable y castellano
    es una vieja historia sin par
    de un gran pueblo Asturiano.
    Antes de la copia el original,
    que en lectura y entendimiento
    tanto monta, monta… igual.
    Y con la venia señorías…
    pónganse en disposición
    tomen unas sidras frías
    y tírense en el sillón…..

    Falsa Leyenda
    A un llugarín que nun cito,
    enclavau nel altu Aller,
    llantároni un sambenito
    que ye falsu a mio entender.
    Dalgún maimón pregonó
    que aquella gente sencilla,
    fai munchu tiempu, acordó
    el facer una capilla.
    Que xuntos, toos los vecinos,
    trabayaron más d´un mes
    trayendo piedra, tapinos[2]
    y llevantado parés.
    Hasta aquí muy natural,
    nun hay na que mos sorprenda,
    pero en la viga central
    está el quid de la leyenda.
    Diz esa leyenda incierta,
    y per tantu sagerá,
    que al metela per la puerta
    metíenla atravesá.
    Que tras tática tan mala
    y después de dura brega,
    acordaron el doblala
    untándola con mantega.
    ¡Mentira com´una casa¡
    Sabemos los alleranos
    que a fuerza d´untar con grasa
    solo doblen los paisanos.
    ¿Nun lo vamos a saber
    si munchos lo comprobaron?
    Les manteguines d´Aller
    ¡a cuantos homes doblaron¡
    Persones series y fines
    y muy respetables elles
    ante nuestres manteguines
    doblaron como cibielles[3].
    A fuerza de ser sinceru,
    y aunque nun creu en esfriegues
    de ningún mal curanderu,
    tengu fé en nuestres mantegues.
    So virtú tá tan probá
    que… permitíi que lo diga:
    nun m´estrayaría ná
    que hubieren diblau la viga.

    Falsa Leyenda
    En un lugar que no cito
    enclavado en el alto Aller
    pusiéronle un sambenito
    que es falso a mi entender
    Algún mamón pregonó
    que aquella gente sencilla
    hace mucho tiempo, acordó
    el hacer una capilla
    Que juntos, todos los vecinos,
    trabajaron más de un mes
    trayendo piedra, tapinos
    y levantando paredes.
    Hasta aquí muy natural
    no hay nada que nos sorprenda,
    pero en la viga central
    está el quid de la leyenda.
    Dice esa leyenda incierta,
    y por tanto exagerada,
    que al meterla por la puerta
    metíanla atravesada.
    Que tras táctica tan mala
    y después de dura brega,
    acordaron doblarla
    untándola con manteca.
    ¡Mentira como una casa!
    Sabemos los alleranos
    que a fuerza de untar con grasa
    solo doblen los paisanos.
    ¿No lo vamos a saber
    Si muchos lo comprobaron?
    Las mantequinas de Aller
    ¡a cuantos hombres doblaron!
    Personas serias y finas
    y muy respetables ellas
    ante nuestras mantequinas
    doblaron como cibiellas.
    A fuerza de ser sincero
    y aunque no creo en esfrieguas
    de ningún mal curandero,
    tengo fe en nuestras mantecas.
    Su virtud está tan probada
    que…permitid que lo diga:
    no me extrañaría nada
    que hubieran doblado la viga.

  • Por Ernesto, 23 febrero 2012 @ 22:09

    Esta historia que se cuenta en Felechosa como real puede que tenga una base histórica. Felechosa es un pueblo de Vaqueiros de Alzada trashumantes (verano en los mayaos o brañas e invierno en el pueblo). Y por tanto de constumbres paganas y licenciosas y sobre todo distintas a los de las villas vecinas. Los Vaqueiros fueron discriminados por las instituciones. De hecho se encontraron en algunas iglesias una “viga atravesada” donde se leía “que no pasen de aqui los vaqueiros de alzada” y de ahí los de la VIGA ATRAVESÁ. Para más desprestigio se inventaron esta historia.

  • Por Rompeolas, 2 marzo 2012 @ 14:41

    Una vez más, gran historia. Enhorabuena.

  • Por Rosa, 2 marzo 2012 @ 14:44

    ¿Pero de dónde saca Usted tantas historias? Me gusta mucho leerlas y siempre tengo ganas de leer más, pero se prodiga Usted bien poco Don Alberto. Saludos

  • Por PEPE PETIT MALET, 10 abril 2012 @ 20:11

    ALBERTO ENVIAME TU CORREO
    UN FUERTE ABRAZO DESDE LA LEJANIA….PERO NUNCA DESDE EL OLVIDO

  • Por Albino, 8 septiembre 2012 @ 22:40

    Si alguien tiene “Apoyado en el tapial” año 1956 de José Campo Castañon le agradecería me enviase una copia. Un saludo, Albino.

Otros enlaces a la entrada

RSS feed para comentarios en la entrada.

Deja un comentario

Opiniones Libres