Sobre mí
No estoy seguro de que para poder leerme sea imprescindible conocer mi formación académica o mi bagaje profesional. Ni siquiera es preciso saber de mi trayectoria ideológica, la que me ha permitido, sin duda, estar hoy aquí. Porque si me han invitado a formar parte de esta revista digital es por mi pasado político. Creo que eso es lo que me ha homologado como opinólogo. Por supuesto, mi vida privada es sólo mía y de quienes la comparten conmigo porque yo así lo he querido.
Soy inquieto, curioso, extrovertido, charlatán, un poco payaso. Pero un trabajador serio y responsable, que sabe dónde y cuándo estar como hay que estar.
Soy de izquierdas, progresista, exmilitante con carné de un partido, y he ocupado cargos públicos. Pero por encima de todo eso, me tengo por un demócrata convencido que tiene como banderas la Libertad y la Justicia. A los demás les exijo el mismo respeto que yo les tengo.
A través de lo que escribo se me puede conocer. Trato de ser sencillo en mis ideas, y directo al exponerlas y defenderlas. No huyo de la confrontación del pensamiento, pero siempre que se juegue con inteligencia, porque lo vulgar me aburre.
Mis escritos en este blog están abiertos a la crítica, porque sólo con la crítica se mejoran presentes y se construyen futuros.
Todo esto soy yo. Nada excepcional, todo corriente. Sólo yo.