LAS ANÉCDOTAS
Estas comunicaciones quiero transformarlas en un hermoso jardín cargado de flores; las anécdotas que serán el centro y la sustancia de estos relatos.
D. Gregorio Marañón decía que según pasan los años, lo único que vale es la anécdota, como condensación manifiesta de la persistencia y del humor. Anécdota que es destilación de la realidad, su más pura esencia, lo que queda, lo que perdura a fin de cuentas, y que la tradición oral transmite de generación en generación.
En alguno de los relatos podrá parecer que subyace algún matiz crítico, pero no es lo que pretendo, porque no estoy analizando lo social, ni lo político, ni lo religioso del momento, aunque tampoco quiero disimular, ni coartar mi manera de pensar.
Por tanto ni la crítica, ni la apología son protagonistas de estas historias, lo verdaderamente importante es el sentido del humor y la ironía que se deriva de ellas, con la única finalidad de entretener a mis amigos, los eventuales lectores.
Cuando hablo del sentido del humor tengo la necesidad de recurrir a mi amigo Jesús, al maestro por excelencia, el profesor Lobato de Blas, que nadie mejor que él define y practica lo que es el humor. El profesor Lobato dice que el humor, el sentido del humor es el único bicarbonato posible para dar el cauce debido a las ideas más áridas e indigestas, a las más peregrinas e, incluso, a las de clara imparable naturaleza surrealista. El sentido del humor, totalmente compatible con la sensatez, la gravedad y rigor es, sin duda alguna, la esencia sublime de la sensibilidad y la mejor arma, posiblemente la única, contra la pétrea insensibilidad de tantas, que diariamente nos rodean. El humor es lo inesperado, lo que rompe el cartesiano plan de la mediocre rutina diaria, lo que nos permite, en fin, llegar a una reconfortante jubilación sin acabar cardíacos.
22 junio 2009 19:58 5 comentarios
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Por Mazarino, 22 junio 2009 @ 21:37
Bueno D.Alberto parece que por fin se pone Ud. a escribir despues de tanto esperarle. Lo que deseo es que dados sus conocimientos y experiencia la politica no quede fuera de sus escritos.
Por Federico, 23 junio 2009 @ 12:01
Totalmente de acuerdo con usted, la anécdota y el sentido del humor son fundamentales y necesarios para disfrutar de la vida
Por Saw, 24 junio 2009 @ 14:24
D. Alberto veo excesivo mezclar en el mismo articulo a Marañon y Lobato. Sobre todo por las manias y fijaciones del segundo, lo cual pone muy en duda la rectitud de sus juicios.
Por Gonzalo, 9 julio 2009 @ 20:43
Me gustaria mucho,que en este tiempo, de tan mal gusto,polico periodistico, y de tanta timidez, de la derecha, vendria muy bien, entremezclar, este tipo de relato,que nos pueda dejar un buen gusto de boca, con algun comentario critico politico actual, que pienso tiene un gran interes.
Por javier lopez, 19 agosto 2009 @ 18:02
desconocia el bicarbonato de jesus lobato,pensaba que solo tenia interes por los productos elaborados en la tercera provincia del reino unido