Des-información y no-información

Aqualia, la empresa que gestiona el agua de Santander, tiene un teléfono de atención al cliente. Bueno, en realidad tiene dos: unos para horario laboral, de lunes a viernes, que es el que aparece varias veces en negrita en la factura, y otro para averías, al que te remite el primero si llamas en los tiempos de descanso del personal. Los dos son de esos números de gasto compartido entre llamado y llamante (902), así que si pasa algo un domingo, pongamos por caso, y llamas al que conoces por la factura, pagas para que te reenvíen al otro. Y pagas también en el otro, por supuesto, para que no te informen de nada, o de casi nada.

Anoche no había agua en casa, y llamé al teléfono que no funciona en festivos (hacer caja, hace, pero atenderte no te atiende), que me dio el que sí. En este, un chico me explicó que algo se había roto cerca de mi calle, y que estaba cortado el suministro en toda la zona. De lo que no podía informarme era del tiempo de la reparación, porque no conocía el alcance de la avería. Esta mañana, a las siete, seguía sin haber agua y volví a llamar para interesarme por la marcha de los arreglos. Craso error, porque lo único que conseguí fue pagar la llamada y quedarme como estaba. Bueno, como estaba no, peor, porque me quedó claro que el servicio de información de Aqualia no tiene información que dar, y ya de paso que las cuadrillas de las reparaciones de noche no trabajan.

Por resumir, la chica del teléfono me contó que a las 12 menos cuarto los operarios se retiraron del lugar del reventón sin repararlo, ella creía que porque no debían tener todo el instrumental necesario (conclusión primera: el servicio de averías sale a reparar con lo puesto); que esta razón para que se dejara la reparación a medias a esa hora era en realidad una suposición suya (conclusión segunda: cabe cualquier otra explicación, como que los operarios no quisieran que les salieran sabañones por el frío, por ejemplo); que se retomarían los trabajos a primera hora de la mañana (conclusión tercera: la primera hora mañana para ellos es distinta de la mía, y debe andar más por la mañana); y que no podía decirme cuánto tardarían en arreglar la rotura porque a ella no la habían informado (conclusión cuarta: el servicio de información de Aqualia está muy mal informado). El sistema te avisa, cuando contesta, que la conversación puede ser grabada para mejorar la calidad del servicio. Pregunté a la muchacha si por casualidad la mía era de las grabadas, y me respondió que sentía no poder decírmelo porque tampoco eso lo sabía. Total, que excepto la obviedad de que había una avería, algo de lo que los grifos de la casa ya me habían informado cuando giré los mandos y no salió nada, en el teléfono de atención al cliente de Aqualia no han podido ofrecerme respuesta práctica alguna a mis preguntas.

Me chiflan estos servicios que se montan las empresas para salvar la cara en su publicidad, con sistemas complejos de voces metálicas y amables operadores de call centre, pero que no te resuelven nada. Incluso al contrario, que te dejan peor que estabas, porque a la falta de información añades perplejidad, cuando no directamente enfado, por lo inútil que resultan. Aqualia me ha soplado unos céntimos de euro teniéndome al teléfono para no darme ningún dato que me haya resultado útil. Bueno, sí que me lo ha dado: su servicio no vale un carajo. Y yo me pregunto por qué los usuarios nos quedamos de brazos cruzados mientras nos timan con esperpentos como este, con todo mi respeto sea dicho de paso por lo eficaces que si que resultan para colocar a unos cuantos y cuantas atendiendo un teléfono en el que podían reproducir cintas de Gila, que darían más risa.

(PD. Por la prensa he sabido que el reventón de los tubos fue a las ocho y media de la tarde, así que entre esa hora y en la que los operarios se retiraron a donde quiera que se retiraran, si no tenían con qué hacer el arreglo, debieron pasarlo pipa viendo salir el agua a chorro. Y sí sí que tenían, no entiendo por qué se fueron sin repararlo. Casi vuelvo a llamar a Aqualia para preguntar. Menos mal que he releído lo que acabo de escribir).

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2 comentarios

  • By Libertario, 1 diciembre 2009 @ 10:00

    Debería Ud. hacer más incursiones en la literatura costumbrista. Es muy ameno lo que escribe, naturalmente con independencia de su justo y homérico cabreo.

  • By rojoyverde, 1 diciembre 2009 @ 17:03

    Suerte.

    Las obras del PSIR de Tanos-Viernoles nos costaron a los torrelaveguenses dos días y pico sin agua…

    Y Aguas Torrelavega no tiene teléfono de emergencia. Si te pasa algo de noche, o en festivo, allá tú.

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